Son los llamados agresivos pasivos. Pueden destrozarte psicológicamente . Son letales. Su juego consiste en ignorarte con pequeñas migajas de falso amor y atención. Utilizan esta treta para tenerte «enganchado» y desquiciado porque al no tener noticias de esa persona que huye y desaparece sin previo aviso, la víctima puede enloquecer, siendo gran menoscabo para su autoestima que quedará dañada. Aquí la víctima necesitará ayuda profesional ya que no entiende tal retorcimiento mental de la persona que le maltrata.
Los seres humanos necesitamos creer en la otra persona sobre todo cuando hay un vínculo, en principio mutuo, de amor. Cuando uno de los dos se salta la regla de la confianza y del amor sincero, la víctima sufre un infierno de emociones encontradas.
Esta técnica del maltrato pasivo ya la ha usado con anteriores víctimas ya que el maltratador/a no ama, no sabe amar y por eso va de pareja en pareja ya que realmente no las ama y va dejando a lo largo de su vida un reguero de víctimas rotas.
Alguien dijo una vez: al ser humano si le das a elegir entre la nada, es decir, entre que le ignoren, y que le insulten, prefiere mil veces que le insulten. Ya que el hecho de que te ignoren, no te hablen durante semanas, meses, años…es más dañino que si te pegan, insultan…
Hoy en día, por desgracia, poca gente va a enamorarse o se enamora. Vivimos en una sociedad egoísta, caprichosa, donde los valores de lealtad, amor, abrazos sinceros, caricias, respeto, consideración…no está de moda. Lo que se lleva es el hoy me voy con uno/a mañana con otra/a. Lo que se lleva es conseguir todo cuanto antes mejor, caiga quien caiga.
El 60% de las parejas están por interés: para pagar el alquiler o la hipoteca a medias, para no estar solo/a, para que mis amigos vean que sigo ligando…etc
Dónde está el amor? Dónde está la ayuda desinteresada? Dónde está el hacerte responsable de tus errores? Dónde está el compromiso firme, la lealtad y la integridad? Personas que quieren estar en una relación pero que enseguida que surgen conflictos huyen. Personas sin personalidad, egoístas y malcriadas. Niñas y niños grandotes con muy poca formalidad y seriedad. Denotan inmadurez y maldad.
Hay familias que actúan así, hijos que han aprendido de sus padres a huir, a desaparecer, a no dar señales de vida. Y entre ellos mismos hay gran resentimiento y dolor.
La persona que ejerce el daño, el vacío, la que te ignora, carece de empatía y le importa un bledo si sufres o no. Es más, disfruta con tu dolor. Mucho cuidado con esas personas. Te harán mucho daño. Protegete. Y desde luego, si puedes huye para no volver con ellas jamás.
Saber amar con el corazón 